TESTAMENT – CANNIBAL CORPSE en Groove (Buenos Aires, Argentina)
Martes 24 de noviembre de 2015
por Pablo Melogno
Testament llegaba nuevamente a Buenos Aires después de la última visita en 2013, cuando presentaron «Dark Roots of Earth» (2012). Desde entonces no ha habido disco de estudio, pero la expectativa de nuevo material fue bien colmada por el vivo «Dark Roots of Thrash» (2013). Con estos antecedentes llegaba Testament al coqueto local Groove del barrio porteño de Palermo, que ya contaba con el aforo de 2000 personas colmado cuando subió Cannibal Corpse.
La formación comandada por el vocalista George Fischer entregó un show potente y muy prolijo, mezclando viejos clásicos como “Hammer Smashed Face” y “Disposal of the Body”, con temas de su último disco «A Skeletal Domain» (2014), como “Sadistic Embodiment”, y “Kill or Become”. Fischer entró en muy buena sintonía con el público porteño, y a pesar de cierta saturación en el sonido de las guitarras, Cannibal entregó un show pleno de brutalidad, técnica y energía.
Cerca de las 10 de la noche se abrió el telón para Testament. Apenas Gene Hoglan se paró atrás de la batería el público empezó a aplaudir, y ya no pararía en toda la noche. Siguieron Chuck Billy, Eric Peterson, Steve di Giorgio y Alex Skolnick, y ya el escenario quedaba chico para semejante formación. No había sonado un solo acorde, y la gente seguía aplaudiendo. No es de extrañar de una banda en la que cada miembro por sí sólo es un ícono del metal.
Con un sonido bien templado, que permitía distinguir desde los platillos de la batería hasta los sutiles arreglos del bajo, la banda abrió fuego sin piedad con el clásico “Over the Wall”, destilando potencia y a toda entrega. El set alternó temas de casi todos los discos, excepto «Souls of Black» (1990), «The Ritual» (1992) y «Demonic» (1997), e incluyendo “Rise Up” y “Native Blood”, del último «Dark Roots…», muy celebrados ambos en el clima de desenfreno que seguía cada vez que Billy anunciaba el nombre de un tema. El pogo y el mosh no dieron descanso en toda la noche. El público disfruta Testament con intensidad, vibrando cada segundo con los dientes apretados, casi como si fuera una cuestión de principios más que de disfrute.
Algunos de los momentos más altos fueron “Into the Pit”, “D.N.R.”, “More Than Meets the Eye”, “Practice What You Preach” y la dramática “True Believer”. La presencia escénica de Chuck Billy es avasallante; el vocalista hace el mínimo gesto y el público responde, con la complicidad de quienes pertenecen a la misma tribu y manejan los mismos códigos. Una tribu siguiendo al gran jefe indio que ruge desde el escenario, y está dispuesta a dejar todo en cada tema. La base rítmica di Giorgio-Hoglan ha escrito algunas de las mejores páginas del metal, en primera fila el monumental «Individual Thought Patterns» (1993), de Death; y si bien por una cuestión de estilo di Giorgio no practica en Testament el virtuosismo sin freno que deslumbró en Death y Sadus, verlo nuevamente junto a Gene Hoglan es una experiencia de primer orden. Eric Peterson ha sido históricamente el alma compositiva de la banda, y suyo es el mérito de la mayoría de los riffs que hicieron grande a Testament, y que en buena forma defiende en el escenario. Queda por último el gran Skolnick: una combinación perfecta, casi inhumana, de técnica, swing y sentimiento. En el medio del sudor, de los codazos, del pogo más salvaje, el hombre de la guitarra da un par de pasos hacia adelante, se encarama y ataca con un solo. El pogo disminuye paulatinamente, el público escucha extasiado y aplaude. Cada solo es un tema dentro de otro tema, una muestra de estilo y pasión de uno de los mejores guitarristas del género.
Alguien en el público levanta una remera de Death, y Steve di Giorgio responde llevando la mano al corazón. Testament representa mucho de la mejor historia del metal, hoy condensada en una formación de antología; es una banda que estuvo en el comienzo del thrash en la Bay Area, en ediciones de Monsters of Rock que hoy son de leyenda, y en los días aciagos de la década de los 90’s. Testament siempre estuvo, y casi siempre hizo buenos discos, que a fin de cuentas es lo central del asunto. Por eso, hoy pueden darse el lujo de tener una discografía cargada de clásicos, y ver cómo el público vibra con los temas de los dos últimos discos tanto como con las viejas canciones. Testament es el pasado y el presente del metal, y representa una historia que se sigue escribiendo porque está viva y vigente. Para el cierre cayó como una aplanadora “The Formation of Damnation”, con público extremando fuerzas para responder a semejante desafío sonoro. Fueron 17 canciones, un show visceral, sin pausa, intenso hasta las vísceras. Cuando terminó quedaba la sensación de que había sido muy corto, todo el mundo quería más. Larga vida a los reyes de la Bay Area.
SETLIST CANNIBAL CORPSE
1. Scourge of Iron
2. Demented Aggression
3. Evisceration Plague
4. Stripped, Raped and Strangled
5. Disposal of the Body
6. Sentenced to Burn
7. Kill or Become
8. Sadistic Embodiment
9. Icepick Lobotomy
10. The Wretched Spawn
11. Dormant Bodies Bursting
12. I Cum Blood
13. Unleashing the Bloodthirsty
14. Make Them Suffer
15. A Skull Full of Maggots
16. Hammer Smashed Face
17. Devoured by Vermin
SETLIST TESTAMENT
1. Over the Wall
2. Rise Up
3. The Preacher
4. Henchmen Ride
5. Dog Faced Gods
6. Native Blood
7. Legions of the Dead
8. True Believer
9. Into the Pit
10. Practice What You Preach
11. First Strike Is Deadly
12. The New Order
13. D.N.R. (Do Not Resuscitate)
14. 3 Days in Darkness
15. Disciples of the Watch
16. More Than Meets the Eye
17. The Formation of Damnation