Accept, una de las bandas más legendarias del Heavy Metal alemán, realizó su primer show en suelo uruguayo luego de más de cuarenta años de trayectoria, el cual fue un éxito absoluto. Minutos antes del mismo, RISE! dialogó mano a mano con su eterno guitarrista Wolf Hoffmann, quien con muy buena disposición respondió a todas nuestras preguntas. Como anécdota cabe mencionar que antes de abandonar el hotel para dirigirse hasta la Sala del Museo donde iban a realizar su presentación, tanto Hoffmann como el bajista Peter Baltes, estuvieron viendo videos de AC/DC, una de sus grandes influencias musicales, a modo de homenaje al histórico Malcolm Young, quien había fallecido apenas horas antes.
RISE!: – Antes que nada, bienvenidos a Uruguay por primera vez!
Wolf Hoffmann: Muchas gracias, es genial estar aquí. Llegamos ayer y tuvimos un día libre, así que salimos a caminar por la ciudad.
R!: – Estuvieron más que nada por acá en la Ciudad Vieja?
WH: Sí, estuvimos en el Mercado… algo.
R!: – Del Puerto?
WH: Sí! Mercado del Puerto. Fue fantástico!
R!: – Qué sabían del país antes de llegar?
WH: Para serte honesto, nada. No es un país que estaba en mi radar, eso pasa con los países donde no has estado antes, no sabés realmente mucho de ellos.
R!: – Entonces, qué esperás del show de esta noche?
WH: Un montón de fans muy locos! Espero que así sea, sabés? Porque generalmente el público en Sudamérica es muy loco, son muy apasionados y están realmente metidos en el show. Recién llegamos de Argentina y fue excelente, así que espero que esta noche sea algo similar.
R!: – Hablemos un poco de su última producción «The Rise of Chaos». Este es el primer trabajo junto a Uwe Lulis en guitarra y Christopher Williams en bateria, hubo alguna diferencia en lo que tiene que ver con el proceso de composición y grabación?
WH: No, la verdad es que encontramos a estos dos chicos cuando estábamos en la gira de «Blind Rage», y fue una muy fácil transición. Nadie, ni siquiera ellos mismos, esperaban cambios grandes en la manera en que trabajamos, porque es una tradición desde hace muchos años que Peter y yo comenzamos con el proceso componiendo los riffs, los temas, y eventualmente llamamos a Mark (N. de Ed.: Tornillo, vocalista) para que se involucre, así como también el productor Andy Sneap. Entonces hay una manera de trabajar ya establecida, y por supuesto que los nuevos chicos ayudan, pero no cambian nada en ese aspecto.
R!: – Y qué sucedió con los anteriores integrantes Herman Frank y Stefan Schwarzmann?
WH: Simplemente quisieron abandonar el barco y continuar sus propios proyectos. Nosotros queríamos apoyarlos, dijeron que querían tener su propia banda y los dejamos ir. Es un proceso normal, estás con una gente durante unos años y luego esa gente quiere irse. Es como pasa con las empresas, si alguien quiere cambiar de lugar de trabajo, no deberías detener a nadie que piensa que pertenece a otro lugar o que puede hacerlo mejor en una posición en otro lado.
R!: – Cómo se siente tener actualmente en la banda a alguien que nació cuando «Metal Heart» fue lanzado? Me refiero a Christopher…
WH: Ese es un hecho que sigo olvidándome, porque no lo se, Christopher no parece un tipo tan chico. El tiene un alma de grande y nosotros seguimos siendo como unos chicos, así que creo que estamos en sintonía en el medio. Pero estás en lo cierto, a veces digo «un momento, este álbum salió cuando ni siquiera habías nacido», pero generalmente no pienso en eso.
R!: – Y cómo fue que lo conocieron?
WH: Lo conocimos en Nashville, Peter sabía de él. Christopher era un baterista de la escena de metal local de Nashville, y como la gente sabe, Nashville es un lugar lleno de música Country. Es algo totalmente distinto, pero Christopher era el metalero de la ciudad, y Peter lo conoció en una jam session, y empezaron a tocar juntos en uno de estos bares donde la gente simplemente se sube al escenario y tocan juntos covers de varias bandas de metal. Él era uno de los tipos en ese grupo, así que cuando el puesto estuvo disponible, pensamos en darle una oportunidad porque sentíamos que sería bueno tener a un chico local, ya que generalmente vivimos muy lejos el uno del otro, y la idea de tener a alguien viviendo cerca era muy atractiva. Además no estábamos buscando a un baterista que haya estado en veinte bandas antes, que quizás iba a tener nuestra edad, queríamos un nuevo talento.
R!: – Volviendo al álbum, este también fue producido por Andy Sneap. Qué es lo que les gusta en especial de Andy y cómo es la experiencia de trabajar con él?
WH: Se siente más como que es un miembro más y no alguien que viene desde afuera. Es realmente parte del equipo, es uno más de nosotros, más allá de que no venga a las giras y lo veamos una vez cada dos años. Hay como una especie de conexión, de hermandad entre nosotros, y lo respetamos así como pienso que nos respeta a nosotros. Él creció siendo un fan de Accept porque es más joven, pero tampoco es tan joven, tiene mucha experiencia y sabe perfectamente lo que hace, pero es un poco más joven que nosotros y nos da una mirada que realmente valoramos. Tiene un espíritu más joven y además creció con toda esta tecnología de Pro Tools, así que nuestra manera de componer a lo vieja escuela con este sonido más moderno es algo que parece funcionar realmente bien.
R!: – Bueno, en el álbum hay un tema llamado «Analog Man», el cual habla de un tipo que no entiende o no se siente cómodo con el mundo moderno. Este tema fue compuesto por Mark, cierto?
WH: Sí, ese fue Mark.
R!: – Pero cómo te sentís vos en esta era digital? Extrañás algo de la era analógica?
WH: Bueno, a veces sí por supuesto, creo que a todos nos pasa cuando miramos en retrospectiva y nos preguntamos cómo hacíamos cuando no había iPhones ni todas estas cosas. Algunas cosas eran más fáciles, pero otras no lo eran, tenías las grabadoras de cassette que siempre se rompían. No es que fuera mejor en aquella época, yo soy un tipo que acepta todas las nuevas tecnologías, pero a veces tengo esos momentos donde me vienen ganas de tomar esa vieja cámara grande y hacerla pedazos. Mark es más de decir las cosas directamente, cuando odia algo, te lo dice. Él es el tipo de la banda que ha estado diciendo estas cosas por años, así que pensamos que podía ser un buen tópico para una canción.
R!: – «Race to Extinction» es otro tema con un mensaje fuerte…
WH: Sí, es un poco apocalíptico.
R!: – Básicamente trata sobre el fin del mundo como lo conocemos, qué creés que es lo más importante que la gente debería dejar de hacer para detener este camino hacia la extinción como dice la canción?
WH: Realmente no lo se. No soy de esos tipos que le dicen a la gente lo que tiene que hacer. Por supuesto que hay canciones que tienen estos mensajes, pero lo hacemos simplemente describiendo la situación como todos la estamos experimentando. A veces te despertás y ves las noticias, y decís «maldición, se está cayendo todo a pedazos», y te das cuenta que un día más pronto de lo que pensamos, todo se va a terminar. Pero básicamente eso es lo que hacemos, solamente observar, no tenemos una solución, nadie la tiene realmente. No somos una banda política que quiere decirle a la gente lo que tiene que hacer o pensar. Simplemente estamos intrigados por ciertos eventos y ese es uno de ellos. Además tratamos de mantenernos alejados de los clichés del rock and roll y el metal en cuanto a las letras, las cosas de las que hablan las bandas todo el tiempo, ya sean cosas ficticias o el rockear toda la noche y ese tipo de cosas.
R!: – Hay algo de lo que te arrepientas de tu carrera?
WH: No! Porque no pienso de esa manera, y por eso mismo compusimos ese tema, porque siempre ha sido un tópico que ha estado en mi vida. Cuando algo termina, olvidate de ello. Cuando la bala salió del arma, cuál es el punto de pensar «me hubiera gustado hacer esto o aquello». Bueno, el hecho es que no lo hiciste, y tenés que vivir de acuerdo a tus decisiones. La gente siempre me pregunta «pensás que algo en tu carrera podría haber sido diferente?», bueno, quizás sí, pero cuál es el punto de pensar mucho en eso? Estamos viviendo en el presente y luego viene el futuro.
R!: – Cuál sería un sueño hecho realidad a esta altura de su carrera? Porque han logrado de todo a lo largo de estos años.
WH: Simplemente disfrutamos de lo que hacemos, y siempre deseás conciertos más grandes, más ventas de discos, cosas así. Pero eso es algo secundario al lado de disfrutar realmente lo que hacés, y querés más de eso. No quisiera nada diferente en mi vida. Si me preguntás por algo que no hayamos logrado todavía, supongo que un Premio Nobel por el Heavy Metal estaría bueno, pero eso no sucederá (risas)
R!: – Cambiando de tema, ayer fue un día muy triste para toda la comunidad musical…
WH: Sí, por lo de Malcolm Young, él fue una influencia muy grande para Accept.
R!: – Lo se, por eso quería preguntarte si tenés alguna historia particular con él que recuerdes?
WH: Nunca lo conocí, lamentablemente. Tocamos con AC/DC hace unos cinco o siete años. Hicimos tres fechas abriendo para ellos, fue un gran honor, habia una multitud enorme, pero ellos llegaban dos minutos antes de empezar su show y se iban enseguida terminaban, y nosotros también teníamos que irnos, así que nunca tuvimos la oportunidad de alabarlos. Pero al menos estuvimos en el escenario con los cañones y todo eso, fue muy cool.
R!: – Supongo que te habrán preguntado esto un montón de veces, pero siempre queda la curiosidad, cuál es el origen del nombre de la banda?
WH: Cuando me uní a la banda siendo un adolescente, la banda ya se llamaba Accept. Ellos ya estaban tocando hacía unos tres años en escuelas locales, era básicamente una banda de barrio. Honestamente a mi nunca me gustó mucho el nombre, pero con los años el nombre quedó ya establecido.
R!: Lo aceptaste… (risas)
WH: Sí, lo acepté y me acostumbré. Me uní a esta banda y nunca la abandoné. Nunca estuve en otra banda. Es mi historia.
R!: – Cuál dirías que fue la mejor y la peor era del metal?
WH: Diría que la mejor fue los 80’s porque fueron muy especiales. Fue ahí cuando todo sucedió por primera vez, así como todo lo que hacés en tu vida por primera vez, tiene algo mágico y especial. Cuando aparecieron todas estas bandas, incluyendo a Accept, se estableció una escena, así que los 80’s diría que fueron los años donde se forjó todo, y luego fue más que nada refinarlo, y todas estas cosas nuevas comenzaron a suceder a tal punto que a veces ya no sabemos ni que está pasando. Tenés de todo tipo de metal… Death, Doom, Speed, hay tanta cosa que ya no se qué es qué.
R!: – Muchas bandas que fueron exitosas en los 80’s y luego se disolvieron, han vuelto a juntarse en estos últimos años, pero no todas ellas han lanzado buenos discos. Sin embargo, ustedes han sacado algunos de los mejores discos de su carrera en esta década…
WH: Gracias. Bueno, eso es mayormente porque teníamos algo que probar. En nuestra situación, estábamos volviendo con un nuevo vocalista y la gente de antemano generalmente piensa que no va a funcionar, así que tuvimos que trabajar realmente muy duro.
R!: – De hecho pasó que no funcionó con otras bandas…
WH: Sabíamos que era una batalla complicada, no podíamos simplemente volver y tocar los viejos temas. Por supuesto que queríamos tocarlos porque es parte de la diversión, pero si hacíamos solo eso, nos ibamos a convertir en una banda nostálgica o una banda de covers, y sabemos que hay algunas dando vueltas. Nosotros no queríamos hacer eso, queríamos comenzar un nuevo capítulo, grabar discos significativos, que tengan relevancia, eso es parte de la diversión, hacer cosas que le lleguen a la gente. Todos pueden tener una cantidad de discos que a nadie le gustan, pero el desafío para nosotros era componer temas que pasen la prueba del tiempo o que estén al mismo nivel que el viejo material. Y pienso que lo logramos.
R!: – En tu último disco solista trabajaste con la Czech National Symphony Orchestra. Cómo se dio el contacto y por qué elegiste trabajar con ellos en lugar de otra orquesta?
WH: Eso es simple. Es porque no conocía a nadie, así que le pregunté a alguien si me podía dar contactos y me dijeron que los integrantes de esta orquesta tenían la mente muy abierta, les gustaba la idea, así que me junté con ellos y trabajamos juntos. Fue muy fácil trabajar con ellos. Hay otras orquestas que son estrictamente limitadas a la música clásica, no quieren saber nada con un guitarrista de Heavy Metal que quiere venir y tocar con ellos, pero estos tipos dijeron que les gustaba la idea y lo hicimos.
R!: – Estuvimos en Wacken donde tocaron con ellos…
WH: Estuvieron en Wacken? Wow! Dios mio! Viajaron desde acá solo para ir a Wacken? Bueno, pasamos muchos nervios con ese show porque era algo que no habíamos hecho antes, eran todas cosas nuevas, temas nuevos y por primera vez iba a tocar mis temas también junto a la orquesta.
R!: – Cuánto tiempo ensayaron con la orquesta antes de tocar en Wacken?
WH: Tres días o dos días y medio. Pero podríamos haberlo hecho en un día porque la orquesta era tan buena, no lo sabía, pensé que nos iba a llevar unas tres semanas. Tres días parecía muy poco, pero el primer día pensé «wow». A ellos les das la música y comienzan a tocarla, nunca la habían escuchado antes. Cada músico recibe lo que debe tocar y comienzan a tocar.
R!: – Planeás lanzar un nuevo álbum como solista relacionado con la música clásica en el futuro?
WH: Claro que sí. Me encantaría hacerlo si tuviera tiempo. Lleva mucho trabajo hacer este tipo de cosas, pero me encantaría.
R!: – Muchas gracias por la entrevista!
WH: Gracias a ustedes!
Foto con Wolf Hoffmann por: Carlos «Closmu» Musetti
DISCOGRAFÍA DE ACCEPT
Accept – 1979
I’m a Rebel – 1980
Breaker – 1981
Restless and Wild – 1982
Balls to the Wall – 1983
Metal Heart – 1985
Kaizoku-Ban EP – 1985
Russian Roulette – 1986
Eat the Heat – 1989
Objection Overruled – 1993
Death Row – 1994
Predator – 1996
All Areas-Worldwide – 1997 (En Vivo)
The Final Chapter – 1998 (En Vivo)
Blood of the Nations – 2010
Stalingrad: Brothers in Death – 2012
Blind Rage – 2014
Restless and Live (Blind Rage – Live in Europe 2015) – 2017 (En Vivo)
The Rise of Chaos – 2017
Symphonic Terror: Live at Wacken – 2018 (En Vivo)
VIDEOS DE ACCEPT
«I’m a Rebel» (1980):
«Balls to the Wall» (1983):
«Midnight Mover» (1985):
«Teutonic Terror» (2010):
«Stampede» (2014):
«The Rise of Chaos» (2017):