Entrevista: PEYOTE ASESINO

A mediados de los ’90, una nueva banda irrumpía en la escena uruguaya con una propuesta inédita hasta ese entonces, una fusión de rock, rap, metal, funk y demás estilos con el toque contemporáneo que le faltaba a un ámbito local que necesitaba urgente ponerse al día con respecto a lo que era el mundo. Esa banda era El Peyote Asesino, quienes luego de lanzar su álbum debút homónimo en 1995 fueron trepando escalones llegando a ser producidos por el argentino Gustavo Santaolalla (Divididos, Molotov, etc.) para su segundo trabajo, «Terraja», de 1998. Todo iba en ascenso para el Peyote, sus shows iban sumando seguidores, sus videos rotaban en MTV, sus discos se vendían en cantidades importantes no solo en nuestro país, sino también en el resto de Latinoamérica, pero un año después los miembros de la banda decidieron tomar rumbos distintos poniéndole punto final a la historia.
En este 2009, diez años después de su separación, El Peyote Asesino anunció su regreso a las tablas formando parte del festival Pilsen Rock realizado en el departamento de Durazno en el pasado mes de Marzo, coincidiendo también con la reedición de su álbum debút, por lo que era la ocasión perfecta para conversar con uno de sus dos vocalistas, Fernando Santullo, acerca del pasado, presente y futuro de una banda que marcó un antes y un después en la historia del rock uruguayo.

RISE!: – Hola Fernando, cómo estás? Cómo va todo?

Fernando Santullo: Bien, trabajando de nuevo en canciones, preparando la salida del disco de Santullo, el trabajo que saco bajo el paraguas de Bajofondo.

R: – Bueno, El Peyote Asesino está de vuelta, está acá, cómo es que se dio este regreso diez años después de la separación?

FS: Fue resultado de un proceso bastante natural. Ya desde hacía varios años la pregunta estaba planteada «che, cuándo se junta el Peyote?». Lo que ocurría es que hasta este momento no todas las estrellas se habían alineado. Por un lado todos, de una forma u otra, volvimos a vincularnos personal y artísticamente en distintos proyectos. Y por otro, cuando Bajofondo nos invitó a Carlos y a mi a cantar «Mal De La Cabeza» en su cierre de gira y vimos la reacción del público, el placer que nos dio a nosotros cantarla, todo eso terminó dándonos la idea de que tenía sentido hacer esas canciones. Sentido para nosotros y para un cierto público que no era tan poco ni tan nostalgioso como pensábamos.

R: – Hace un par de semanas se presentaron en el Pilsen Rock, mucha gente se hizo presente en el festival únicamente porque tocaban ustedes, cuáles eran sus expectativas previas y cómo se sintieron luego con la gran respuesta del público?

FS: Bueno, las expectativas iban en el sentido que te decía antes: la música del Peyote le gusta hoy día a una cantidad de gente que no vio nunca a la banda en vivo. Y eso, el directo, siempre fue una parte importante del Peyote. Y a eso apuntábamos, a dar el mejor concierto que podíamos dar. Cuando vimos ese mar de gente cantando todas las letras y saltando, bueno, eso al menos para mi estuvo por arriba de cualquier expectativa.

R: – Durante el show hubieron algunas sorpresas tales como la participación de Luciano Supervielle y Martin Ferres de Bajofondo como
invitados, y también sorprendieron con un par de versiones, «Back In Black» de AC/DC, y «La Lluvia Cae Sobre Montevideo» de Traidores, cuáles fueron los motivos por los cuales se decidieron por estos covers?

FS: Por el lado de los invitados, Luciano nos dio la oportunidad de disparar todos los samples, tocar todos los teclados y agregar el mundo del scratch, que es un capo en eso. De alguna forma Luciano nos permitió llevar mejor al show todo ese mundo electrónico que tenían los discos del Peyote.
Invitar a Martin a tocar «Mal De La Cabeza» fue un poco como devolver el gesto de Bajofondo en el Teatro de Verano.
Sobre los covers, que no son covers en realidad sino versiones, Peyote siempre tuvo una tradición de versionar de forma peculiar temas mas bien icónicos de rock. «Back In Black» era un tema frecuente en nuestros últimos shows y con Luciano pudimos acentuar el aspecto hip hop de la versión, que por supuesto no existe en la versión de AC/DC. «Back in black» es la canción que yo usaría para explicarle a un extraterrestre que es el rock. Y sobre «La Lluvia Cae Sobre Montevideo», fue tal cual dije en el concierto, es un tema que a muchos nos arrimó a la música, a las ganas de hacer música.

R: – Haciendo un poco de historia, a mediados de los 90 cuando la banda irrumpió en la escena, aportó un sonido moderno para la época, y fusionó diversos estilos, era su intención darle un sonido más moderno a lo que era el rock uruguayo, o simplemente plasmaron sus influencias en esa fusión de estilos?

FS: Las dos cosas creo yo, por un lado sí queríamos sonar «moderno» o distinto a lo que sonaba en la vuelta. Y por otro, para hacerlo echamos mano a lo que nos parecía «moderno» en ese momento. Es decir, el Peyote no fue nunca una banda de género, tipo «hagamos punk» o «hagamos heavy», sino una banda que recogía una cierta actitud, una cierta postura artística, una forma de mirar, antes que un estilo en particular.

R: – Qué recordás de la grabación del primer disco? «El Peyote Asesino»?

FS: Recuerdo el estudio de Luis Restuccia, que grabamos por partes. Al menos para mi era un mundo super nuevo del que entendía poco y nada. Y sigue siéndolo, aunque ahora al menos puedo interactuar mejor con el estudio, con los ingenieros y con el productor.

R: – Dentro de ese disco está el tema «L.Mental», y hablando de eso, de dónde surge tu apodo «L.Mental»?

FS: Lo de L.Mental, que por cierto he abandonado, viene de burlarse de los nombres raperos que se dan para adelante: Master P, Grandmaster Flash, etc. Quise un nombre que tuviera algo medio auto denigrante, por eso L.Mental.

R: – Tras el impacto del disco debút, llegaría «Terraja» en 1998, cómo enfrentaron esta vez el estudio? En qué se diferenció el proceso de grabación con respecto al debút?

FS: Fue un salto a otro planeta. Por primera vez trabajamos con un productor y no con cualquier productor sino con Gustavo Santaolalla que venía de trabajar con Divididos, Café Tacuba y Molotov. Para nosotros, en especial para Juan (N. del R.: Campodónico, guitarrista), fue una gran escuela laburar con Gustavo, y el proceso de grabación fue enteramente distinto, pasamos de grabar en horas salteadas y con un presupuesto ínfimo a grabar y mezclar durante casi dos meses en Los Angeles, las bases en un estudio formidable donde habían grabado Megadeth y Guns N’ Roses, entre otros salados, y el resto en el estudio que Gustavo acababa de terminar, increíble también.

R: – Con «Terraja» llegó el punto máximo de su carrera, logrando mayor difusión, incluso con los videos rotando por MTV, cómo se dio esa posibilidad? Y qué sintieron al verse por primera vez allí dado que en aquella época MTV transmitía desde Miami para varios países de latinoamérica?

FS: Lo de la rotación en MTV era algo emocionante pero lejano, al menos para mi. Es decir, todo bien con los videos, que por cierto estaban super buenos y me siguen gustando, pero por otro lado mi vida no era afectada por esos videos. Ni siquiera tenía cable (ni tengo) asi que no veía MTV.

R: – Qué recordás de las grabaciones de los videoclips de «L.Mental», «Mal De La Cabeza» y «Cable Pelado»? Hay alguno de los tres que te haya gustado más por alguna razón en especial?

FS: Yo creo que el de «L.Mental» recoge muy bien el espíritu del Peyote, una cosa entre refinada y a la vez combativa, donde ocurren mil cosas por segundo. Y recuerdo que ese videoclip se hizo completamente a pulmón, sin un mango, solo con la generosidad de la gente que trabajó en el.

R: – También por aquella época tocaron en Mexico junto a bandas de hip hop como Delinquent Habits y Control Machete, e incluso Juan Brujo de Brujería habló bien de ustedes, había cierta «química» especial con el público y con las bandas mexicanas?

FS: Por un lado la música de Peyote tiene ese elemento mexicano en las letras y por otro el hip hop y el rock alternativo de un estilo cercano al nuestro, estaban sonando mucho en Mexico en ese momento. Con Juan Brujo seguí en contacto durante bastante tiempo, de hecho el último toque de Peyote en 1999 usé la remera de Brujería que me había mandado. Tremendo tipo el Brujo.

R: – Estaban en un nivel alto de popularidad y sin embargo de repente en el ’99 la banda se disolvió, qué fue lo que pasó en aquel momento?

FS: Por un lado era un momento de decisiones, de ver para donde vas a tirar en la vida, por otro nos habíamos pasado todo el tiempo pateando la pelota para adelante, siempre haciendo planes mas grandes y complicados. Y por otro no teníamos buen diálogo en el interior del grupo. Todo eso fue volviendo inviable seguir trabajando juntos.

R: – Volviendo a la actualidad, se reeditó el primer disco de el Peyote, cómo surgió esto? Y por qué decidieron editarlo a través de Bizarro Records?

FS: Bizarro adquirió el catálogo de EMI que a su vez había comprado el catálogo de ORFEO, y en ese catálogo estaba nuestro primer disco. Asi es como se edita, nosotros no decidimos nada, aunque por supuesto nos parece muy bueno que eso ocurra.

R: – Planean editar el «Terraja» también?

FS: Parece que Universal tiene esa intención, si.

R: – Qué será del Peyote de ahora en más? Tienen planes de realizar algún show en Montevideo y/o planes de grabar nuevo material?

FS: Sobre eso, nada aún.

R: – Con todo lo que generó el regreso del Peyote quedó demostrado que la banda logró llegarle a la gente, por qué creen que la gente se identificó tanto con la banda?

FS: Creo que la música de Peyote siguió un camino subterráneo, pensá que son canciones que tienen más de diez años, que nadie tocó ni promovió durante todo este tiempo. De alguna forma esas músicas terminaron diciéndoles cosas a gente que de pronto era muy chica cuando el grupo tocaba en los ’90. Yo creo que si la música tiene potencia, tiene buenas ideas, está bien realizada, y de alguna forma conecta con la sensibilidad de la gente, la gente la escucha. Igual es un fenómeno muy raro.

R: – Habiendo vivido en Mexico, en Uruguay y actualmente en España, qué diferencias y similitudes encontrás entre las escenas de estos tres países?

FS: Diferencias muchas, de estilo, de perfil del público, tantas que no me animo a meterme porque tardaría dos horas. Lo que si creo, a nivel de similitudes, es que Uruguay se ha puesto al nivel de Mexico y España a nivel del profesionalismo con que se trabaja: los plomos, los tecnicos, todos, es gente super pro que no existía hace diez años. En eso si que ha cambiado Uruguay.

R: – Bueno, muchas gracias por la nota Fernando! Para cerrarla podés dejarle un mensaje a todos los lectores de RISE!.

FS: Un abrazo a todos desde Barcelona y ya nos veremos pronto. Abrazos!

Jorge Patacas.

DISCOGRAFIA DE PEYOTE ASESINO

El Peyote Asesino – 1995
Terraja – 1998