ROCKAVARIA 2015 en Munich, Alemania
Viernes 29, Sábado 30 y Domingo 31 de Mayo de 2015
por Gonzalo Deubelbeis
La hermosa ciudad de Munich se encuentra situada en la prolífica región de Bavaria, al sureste de Alemania. Suele ser un destino preferido dada su cercanía a los Alpes; posee el Englischer Garten que es dos veces el tamaño del Central Park neoyorquino y fue la primer ciudad alemana donde se estableció Hitler (por aquellos tiempos un pintor austríaco que nadie conocía). Por si fuera poco en sus cercanías está el Castillo Neuschwanstein y el memorial al Campo de Concentración Dachau.
Después de 5 años sin un festival de rock/metal multitudinario, Munich recibió al Rockavaria el pasado mes de mayo durante 3 días que aglomeraron 49.000 fans según cifras manejadas por la prensa local.
El festival tuvo 3 escenarios simultáneos en el Olympiazentrum (sede de los Juegos Olímpicos en 1972 y tristemente recordado por el asesinato de 17 israelíes en esa oportunidad): el principal situado en el Olympiastadion (OS), uno secundario en el Olympiahalle (OH) y el Theatron para los grupos talento, al cual jamás me acerqué a presenciar nada.
Mi curiosidad por ver el que sería mi lugar en las plateas del Estadio Olímpico esos tres días era grande así que fui para ver el show de Orchid, quienes abrían el escenario y dieron un buen show de Doom Metal aunque frente a una reducida audiencia que aún se resguardaba del sol del mediodía alemán. Como era de esperar las dimensiones de un estadio son descomunales, sin embargo las pantallas laterales al escenario permitían seguir el espectáculo sentado en mi asiento del sector Z3 como un buen niño metalero. Luego de Orchid me trasladé al Olympiahalle, un recinto cerrado y enorme. En éste se estaban presentando Tuxedo, agrupación a mi entender Metalcore, aunque con percusión latina incluida. Estaba cómodo y cercano al escenario así que me quedé observando las siguientes dos bandas, esperando el plato fuerte. Arcane Roots otorgaron una cantidad sin dosificar de melodía y descontrol. El estilo retro de los fineses Poets of the Fall fue bien recibido y no era para menos. Lograron ganarse los aplausos con su actitud. Llegaba Paradise Lost y la cosa se ponía buena en serio. Puntualidad británica, comenzaron a las 17:45 y por 45 minutos no liberaron a su audiencia. Hubo de todo un poco, pero principalmente su material más Doom: temas de ‘Draconian Times’, de ‘Faith Divides Us, Death Unites Us’, dos temas de su nuevo disco ‘The Plague Within’ (por aquel entonces inédito) donde vuelven a las raíces cadentes del Doom que los parió y para mi disgusto nada de su discazo homónimo. Vuelta al escenario principal donde estaban Incubus dando un concierto que se me hizo eterno. Les seguían Muse, una banda que gusta desde el fan del rock pop hasta gran parte del público metalhead. Además, sus letras ameritan destaque. Las mismas abordan la ufología, dogmas religiosos, terrorismo, etc. Vi la primer mitad del show de los del Reino Unido para replegarme al escenario secundario donde Limp Bizkit harían de las suyas, aunque nunca llegaría a mi destino. Cuando me acercaba a los accesos habia demasiada gente y policía fuera. El motivo? El OH estaba repleto y no se permitía más el ingreso de público. A regañadientes me resigné de ver una banda nostálgica que musicalizó mis primeros pasos hacia el Metal, junto a Linkin Park y Nickelback. La organización tuvo que prever que esto iba a suceder. Hubiese preferido ver a los Bizkit en el OS en lugar de la tortura sonora que fue Incubus. Vuelta a ver el final de Muse, quienes bajaron el telón 20 minutos antes de lo previsto, a las 22:40. Obviamente canciones como ‘Knights of Cydonia’, ‘Starlight’, ‘Madness’, ‘Animals’ y ‘Stockholm Syndrome’ supieron iluminar la noche del viernes 29 de Mayo.
A pesar de la negatividad que plasmé en las líneas anteriores, el primer día fue un gran comienzo para el Rockavaria, con puntualidad en los inicios, buen sonido y pantallas en ambos escenarios.
2do día, más prometedor que el 1ro por lejos. Para la primer elección me incliné por Lem Motlow abriendo el Olympiahalle con Hard Rock bien aceitado. Los norteamericanos Black Map les siguieron, aportando frescura con su Metal Alternativo con Grunge. El único detalle a mencionar fueron los silencios prolongados entre canción y canción mientras afinaban sus instrumentos. Vuelta al Estadio Olímpico para ver Hellyeah, a quienes tenía ganas de presenciar. Pasaba la hora de inicio y sin novedades. Los minutos corrían, los silbidos se levantaban y nada. A las 15:40, cuando la banda prácticamente debería estar terminando su presentación, sale un representante de la organización a anunciar la cancelación por problemas técnicos. Segundo fiasco del festival, y por suerte el último. A pesar de todo entiendo que la logística del evento obró bien, ya que retrasar todos los shows en un festival de estas dimensiones hubiera sido poco inteligente. A la gente poco le importó a sabiendas que Accept les seguían. Qué decir de estos veteranos del Heavy Metal? Toda una institución del Metal teutón, y su público supo agasajarlos. El cierre fue con ‘Balls to the Wall’ como no podía ser de otra manera. Corriendo al escenario secundario para tener un buen lugar para Epica, y de paso presenciar el final de Beyond the Black, banda con un enfoque hermano a la agrupación holandesa que precedían, sin esas pinceladas Death pero igualmente compactos en vivo. Epica salió a matar con su carisma, con Simone hablando un alemán fluido. Incluso su tecladista se bajó del escenario y fue a tocar frente a las primeras líneas del vallado. Judas Priest se presentaban en el Olympiastadion y allí estaba yo esperando. Uno de los principales exponentes pioneros en el Heavy frente a un estadio con muy buena condición de asistencia. El Metal God no está en sus veintes y era común que al finalizar una canción se fuera detrás de las cortinas. Así y todo Rob Halford sigue montando su motocicleta sobre el escenario. Agradecido de ver un grupo tan importante en el estilo de música/vida que es uno de mis grandes amores. A nivel visual Kiss dio el mejor espectáculo del RAV 2015. Llamas, plataformas flotantes, fuegos artificiales al final del show y un setlist con ‘Rock N’ Roll All Night’, ‘Calling Dr. Love’, ‘Hell Or Hallelujah’, dejaron a todos sus fans con una sonrisa de oreja a oreja, por más que terminaran a las 22:35, antes de lo establecido en el programa.
Última fecha del festival en el calendario, y la más esperada para quien suscribe. Temprano y con el sol a pleno Exodus lanzaba el primer hachazo a las 13:30. Desde la platea daba gusto ver a los fans abajo en el mosh pit al son de ‘Toxic Waltz’, ‘Tempo of the Damned’ o la más reciente ‘Salt the Wound’, recibida tan cálidamente como el resto de clásicos incluidos. Es bueno tener a Zetro Souza de regreso. Sin apuro pero a paso firme me encaminé rumbo al OH para aguardar a Decapitated. Estos polacos marcaron un hito pero su último material me resultó pobre. Death Metal con cierta influencia del Sepultura más Nu, y para mi descontento promocionaron bastante su reciente lanzamiento. Chuck Billy junto a sus Testament desembarcaban en el OS. El comienzo estuvo marcado por inconvenientes con la salida del micrófono, lo cual se solucionó luego de un par de temas. ‘More than Meets the Eye’, ‘Rise Up’ y más gemas que mi memoria no me permite recordar desfilaron por la amplificación. Primer encrucijada importante: Kreator en el OS o Gojira en el OH. Fácil, los franceses por supuesto! Ver en vivo a estos cuatro músicos es un placer que me estaba dando por primera vez. ‘Backbone’, ‘L’Enfant Sauvage’ y demás canciones enraizaron una actuación sublime con excelente juego de luces. Desearía que estos músicos estuviesen encadenados al escenario pero todo necesariamente debe terminar. Gojira anunció nuevo material en un futuro. Anathema eran los siguientes, un grupo que en particular no sigo pero que logró hacerse un lugar en la musica atmosférica y gótica. Y eso fue lo que tuvimos en cuarenta minutos. Finalmente los suecos Meshuggah traían su Math Metal al escenario. Es extraño pensar que una banda tan compleja y en apariencia ‘cerrada’ haya logrado tal popularidad, aunque así sus fans lo demostraron. La última banda que vería del festival tenía la cena servida, con la cancha repleta y las plateas colmadas, algo que no sucedió los dos días anteriores. Metallica se presentaba en vivo y nadie quería perdérselo. Comenzaron con ‘Fuel’, ‘Unforgiven II’, ‘Cyanide’, ‘Sad But True’, ‘One’, ‘Master of Puppets’, ‘Nothing Else Matters’, ‘Creeping Death’… En definitiva un set list bastante similar al que tantos uruguayos disfrutamos en Argentina el año pasado con el By Request. Y Metallica sí respetó su cronograma tocando 2 horas y 15 minutos, demostrando una vez más la vigencia de su música.
A Within Temptation les tocó pelear con el grupo emblema del Thrash Metal mundial, espero que hayan tenido buena concurrencia.
En un nivel general el balance que hago del Rockavaria es positivo. Siempre hay detalles a mejorar pero muchos de los mismos a veces escapan a la organización. Considerando la excelente respuesta de la audiencia, los pronósticos para el 2016 apuntan a que esta iniciativa se repetirá. Esperemos que así sea!!
Video Resumen del Festival: