Entrevista: CRISTIAN MONTES DE OCA

Cristian Montes de Oca, también conocido por su apodo Cristian Death, es sin lugar a dudas una de las personas que más ha apoyado a la escena local en su historia. Ya en 1990 estaba tocando batería y fue parte de distintas bandas durante varios años, hasta que a principios de la década pasada decidió dejar su actividad como músico y pasó a involucrarse de lleno en otras tareas, apoyando a una enorme cantidad de bandas de la escena. Actualmente es técnico de sonido, organiza fechas, trabaja en una sala de ensayo, edita discos, produce videoclips y registra shows en vivo, material que puede ser encontrado en el canal ValvularTV de Youtube.
Un tipo que ha recorrido miles de kilómetros en pro del metal nacional y que lógicamente tiene mucho para contar y opinar, así que nos juntamos con él y esto fue lo que quedó de la charla…

RISE!: – Hablemos de «Igualdad», el compilado de metal uruguayo recientemente editado, cómo surgió la idea de armarlo?

Cristian Montes de Oca: Nosotros ya habíamos sacado otro compilado en el 2012, el cual tuvo el mismo formato, fue cuádruple, pero ese sí tuvo un costo. Salió una tirada de cien copias que se vendieron todas y salió muy bien. El principio siempre es el mismo, es que cada determinada cantidad de años parece que todo cuadrara mágicamente para que mucha gente grabe. Al principio pensé en «Igualdad» como un compilado de bandas de Valvular TV, después queríamos hacer un compilado extremo porque había muchas bandas que habían grabado material o que iban a grabar, y después se hizo el fichaje de bandas como Vallvuler y Mafia, entonces pensamos en extenderlo a todos los géneros.

Así fue como empezamos a contactar a las bandas, hubo algunas que apuraron su proceso de grabación para tener un tema en el compilado, otras ya habían grabado, y la idea era mostrar el material más nuevo para seguir repartiéndolo durante todo este 2017, tanto en los recitales como en internet. El link de descarga de Mediafire lleva más de 10.000 descargas al día de hoy, fue mucho más de lo que esperaba y obviamente hay gente de otros países que también lo descargó porque no somos 10.000 metaleros en Uruguay (risas)
«Igualdad» fue un proceso que duró aproximadamente un año y medio, incluyendo un período en el que estuvimos muy estancados porque estábamos esperando por alguna banda que terminara su proceso de grabación, pero esperamos y logramos que saliera el material más nuevo, esa es la característica de este compilado. Hay gente que me dice «hay tantas bandas en Uruguay?» y hay incluso más que las que aparecen ahí, y eso es lo más increíble.

R!: – Cómo fue que surgió Valvular TV? Comenzaron haciendo filmaciones de shows en vivo, pero hoy en día también graban videoclips, editan discos…

CM: Todo surgió de la inquietud con el tema del video. A mi me gustaba filmar y me hubiera encantado poder haber hecho esto veinte años atrás, y así hoy poder tener cosas que lamentablemente no están y que solo existen en la memoria del que estuvo ahí y en la anécdota del que te lo cuenta. Valvular TV surge en el 2010 y al día de hoy ya pasa que los únicos registros de algunas bandas es lo que está ahí, y capaz que ni siquiera hay demos, así que imaginate.

R!: – Tal cual, hubo un montón de bandas que nunca grabaron nada y no quedó registro alguno…

CM: Claro, viene alguien y te cuenta de tal banda que estaba demás y cuando buscás material, te encontrás con que lamentablemente no hay nada. Es como me pasa con la que para mi es una de las grandes bandas que dio Uruguay, Delirium Tremens, de ellos nos quedó solo un demo de dos temas y una grabación en vivo de consola, y algunas otras grabaciones que fue subiendo el que fue su bajista, cosas que tenía guardadas en su archivo de otros recitales. Ojalá esos temas pudieran haber sido bien grabados en un estudio, Delirium Tremens podría haber tenido su disco, pero bueno, pasó eso con ellos, con Alto Voltaje (la primer banda que tuvo el Peruano) que solo quedó grabado su tema «Acosados» y una grabación en vivo de aire en el Parque Rodó del ’88, y lo escuchás y te das cuenta que están demás los temas. Así fue que a mi y a mi mujer Mónica se nos ocurrió empezar el proyecto. Ella tenía su cámara y así empezamos los primeros registros ya en el 2009, pero el canal de Youtube empezó en el 2010. Con el tiempo fuimos equipándonos mejor, cambiando cámaras y formatos, fue evolucionando.

R!: – Con cuántas cámaras cuenta Valvular TV actualmente?

CM: Estamos volviendo a pasar el mismo problema que tuvimos en un momento, y es que ahora pasamos del HD al Full HD, entonces ya hay dos cámaras que no las uso más. Todo el mundo quiere que se vea mejor y la idea siempre fue mejorar. También se sumó más gente como el Topo de Soulless Faith que filmó muchas veces con nosotros y Pablo Lufe que ha sido el conductor de algunos programas, ese fue otro proyecto que hicimos durante un tiempo, capaz que lo retomamos en algún momento, pero costaba mucho hacer el programa. Es que hay muchísimo material, en un fin de semana puede que no haya nada o puede que hayan tres toques y tenés un montón de cosas para subir, y el fin de semana que viene hay otra cosa, entonces tenés que decidir si subís el material de las fechas que vas filmando o parás y hacés un programa, pero el programa llevaba demasiado tiempo, y en el medio capaz que estás trabajando con alguna banda para grabar algún video y ya tenés que designar un montón de horas para una filmación o edición. Así empezó a pasar que a veces subíamos cosas al otro día del show y otras las subíamos a las dos semanas.

R!: – Cómo es el tema de los videoclips? Generalmente viene la banda con las ideas o vos aportás las tuyas también?

CM: Hay de todo. El recurso de hacer videos en vivo es el más fácil porque es económico, ya que se hacen muchas tomas y se edita con el audio del disco. Cuando es guionado se requiere de una locación y de un guión, y en ese caso pueden ser ambas cosas. A veces puede ser algo que pida el tema mismo, por la letra o el concepto, o a veces puede ser algo que ya venía armado como cuando hicimos el video «Ni Lágrimas Ni Rencor» de Catarsis. En ese caso, ellos ya tenían armado todo porque hace tiempo querían hacer un video de ese tema e incluso tenían los dibujos de lo que había que filmar y como tenía que ser, y se buscaron las locaciones más parecidas posible porque llevar la idea de un papel a la realidad es complejo. Pero sí, siempre se trabaja con la banda obviamente, ellos son los que tienen la última palabra.

R!: – También han editado varios discos con Valvular TV, tienen planeado editar alguno más próximamente?

CM: Ahora estamos enfocados en el compilado «Igualdad», pero cuando algunas bandas terminen de grabar se les planteará la posibilidad. Hay bandas que ya editaron con nosotros que están grabando como es el caso de C.O.M.A. y Vallvuler. También se está hablando de la posibilidad de editar en formato físico los dos discos de Libertad O Muerte, seguramente sea editado como disco doble y sería bastante complejo. Pero siempre van surgiendo cosas, yo te digo eso hoy y viene otra banda mañana con un disco terminado y lo quieren editar. Los discos se venden en los recitales, no nos copa mucho las disquerías por un tema de costos.

R!: – Y además la gente compra el disco en el recital, muchas veces enseguida de ver la banda…

CM: Claro, la gente va al recital, de repente no conoce la banda y pregunta qué material hay, y ahí se llevan el disco. En cambio en la disquería que también tiene que tener su ganancia, el disco puede llegar a costar cien pesos más, entonces es más fácil comprarlo de la banda directamente.

R!: – Vos tenés un pasado tocando en bandas como Ossuary y Fateless por ejemplo, contame en qué otras bandas tocaste y por qué dejaste la batería?

CM: Un pasado largo y variado (risas). Pero siempre en el lado extremo. Crematorium fue una de las primeras bandas, entré como vocalista y terminé cantando y tocando la batería, porque estaba el problema que tuvo la escena históricamente que es el problema de los bateros, parece que a la gente no le gustara tocar la batería (risas). Entonces hasta el día de hoy pasa que un mismo batero toca hasta en cuatro bandas, pero ya pasaba en esa época, estamos hablando de 1990.
Tuvimos varios recitales donde yo cantaba y en un momento nos quedamos sin batero, y había cosas para hacer así que me puse a tocar. Hay grabaciones que en algún momento verán la luz de ensayos de esa época que estaban buenos.
Después de Crematorium toqué en Orion, esa fue una banda que la formamos con El Bestia, que años después formó Elefante, pero tiene un pasado metalero, siempre fue muy fan de Metallica. En esa banda también tocaba otro amigo, Pablo, un gran fan de Sodom que actualmente vive en Suecia. Así surgió Orion haciendo Thrash, y fue una banda que tuvo millones de cambios de formación y de estilos. Por ahí pasó por ejemplo el Wizard, que si no me equivoco fue su primera banda, y ya se veía su talento, eso fue entre el ’91 y ’92.
Después toqué en Eclampsy en una de sus miles de formaciones (risas). Estuve en la banda en dos oportunidades a mediados de los 90’s, en la época que tenían teclados. Después vino Ossuary también en dos oportunidades, la primera vez cuando se fue el batero, me aprendí todos los temas, pero no llegué a tocar en vivo porque volvió el batero. Ahí con Sebastián empezamos Fateless que eramos un trío de Black, en el que otra vez toqué la batería y canté, y después vino la segunda vez con Ossuary donde sí toqué en vivo, eso fue entre el ’96 y el 2000 en la formación con Marcelo, Portugal y Sebastián. Y a lo último toqué con Ad Noctum, con la cual sacamos un demo de dos temas, fue la primera vez que toqué lento en una banda, me costó mucho (risas). Esa era una banda que si existiera en este momento sería buenísimo, pero en el 2000 la gente no la entendía, era un Doom con voces femeninas en el mismo momento que en Europa el estilo estaba empezando a pisar fuerte. Y bueno, después al empezar a trabajar como técnico de sonido con las bandas, el tiempo se hacía más corto, eran muchos viajes y muchas horas, porque el laburo de sonido empieza a las 6 de la tarde y termina a las 4 de la mañana. Eso sumado a todo lo que hacemos con Valvular y el trabajo en la sala de ensayo, no deja mucho tiempo libre, pero aunque ahora sea desde otro lado siempre estoy trabajando con bandas.

R!: – Qué diferencias notás en la escena local de los 90’s respecto a la actual?

CM: En nuestra época los medios no eran los mismos que ahora, porque a todos nos costaba el triple aprender, todo era más caro y más complicado, pero el corazón y la pasión eran el motor de todo. Hoy por hoy dicen que no tienen espacio y que no hay lugares, pero antes directamente tenías que crear vos el lugar porque no existían. Hoy existen boliches, lugares donde se toca gratis, lugares que se alquilan con buenas condiciones, equipación, alquiler de backline. Antes todo se hacía con mucho más sacrificio, pero las ganas lo podían todo. En el estudio pasaba lo mismo, hoy en día alguien se puede montar un estudio en su casa y sonar mejor que un estudio profesional. Antes había dos o tres estudios donde podías ir a grabar, pero eran muy caros, y todavía tenías que pelearte porque el tipo no entendía lo que era un blast beat, y terminabas haciendo tus propias grabaciones y mezclas porque el tipo con suerte había grabado una banda de rock and roll.

R!: – Y qué es desde tu punto de vista lo que le está faltando al metal uruguayo actual para crecer más y profesionalizarse? Infraestructura, bandas, público, medios?

CM: Infraestructura no es, porque técnicamente estamos a mejor nivel que algunos otros países. Uno puede hablar de Vorterix o Teatro Flores en Argentina, pero acá está La Trastienda o MM Box que hoy por hoy tiene condiciones técnicas mejores a esos lugares, y mucha gente que vino de afuera quedó sorprendida de la equipación con la que cuentan. Cuando vienen los requerimientos internacionales, tenemos lo que nos piden o lo conseguimos.
Por supuesto que todo es dinero, porque no son lugares donde puedan ir a tocar tres bandas locales, es un lugar para mil personas con un alquiler que aunque llenaras, no podrías costearlo, porque increíblemente ese es el mayor problema. Ese es el punto más importante, el tema de las entradas. Cualquier persona se puede fijar y ver que los 150 o 200 pesos de entrada que paga hoy para ir a un show de bandas locales es un precio que está desfasado diez años por lo menos. Si vos mirás afiches de shows de hace diez años, te das cuenta que hay un problema, fijate cuantas veces subieron de precio las cosas, sea la canasta familiar, el transporte, el alquiler y todo lo demás. Lo único que no ha subido de precio en este país en los últimos diez años son las entradas a los recitales, y ahí es donde empieza a surgir el problema, porque tenés que cubrir determinados gastos cobrando lo mismo que cobrabas hace diez años, y a vos no te van a cobrar lo mismo que hace diez años el alquiler de los equipos, las luces, etc. El compensatorio para eso sería si viniera el doble de gente, pero no es así, y ese es el otro problema.
Antes sucedía que una banda tocaba para 200 o 300 personas, y hoy por hoy lamentablemente no vemos eso y es porque antes había un toque cada tres meses, entonces como querías ir a ver a tu gente amiga, no te importaba qué bandas tocaban, ibas igual. El problema actual está en el precio de las entradas y la cantidad de gente, porque hoy a un show con mucha suerte van 100 o 150 personas, pero han habido varios con 50 personas, y vos tenés que cubrir los costos actuales cobrando precios de hace diez años.
También está el tema de la queja y el doble discurso, de gente que dice que prefiere viajar a Argentina porque allá hay shows «de verdad» y ha habido bandas internacionales que en Argentina sonaron pésimo y de repente acá sonaron bien, y esa gente te dice «pero no sonaron tan bien», entonces cuál es el parámetro? Acá hemos visto shows increíbles como el de Motorhead, el de Faith No More, el de Exodus en el Teatro de Verano, ese fue perfecto en todo sentido y los tipos venían de tocar en Argentina para muy poca gente y acá tocaron en un lugar abierto y para más público. Hay lugares que reúnen las condiciones para dar un show internacional de primer nivel, sin embargo la gente ningunea porque solo tiene que tomarse un ómnibus para llegar hasta ahí. Hay mucha gente que no mira la escena local, siempre con el pretexto de que acá no hay bandas nuevas o que las mejores fueron Alvacast, Cross y Chopper, y en realidad hay un montón de bandas nuevas que han sacado discos y que han estado durante muchos años. Aparte de Herrumbre, hay bandas como Sentencia, Apneuma o Ecivresotua que ya pasaron los diez años y siempre en actividad, y no lo aprecian porque está el preconcepto ese de que como es de acá «no está bueno», antes de poner «play».
Acá tenemos las herramientas, los valores, músicos excelentes que empezaron de cero y que vimos crecer a lo largo de los años a través de diferentes bandas, y que ahora tienen la capacidad de hacer muy buen material.

R!: – Como bien sabés, en el 2013 una banda uruguaya tocó por primera vez en el Wacken Open Air, el festival de metal más importante del mundo, lo cual se repitió en el 2015 y sucederá por tercera vez en 2017. Claramente algo como esto era impensable hace unos años, cómo ves un suceso como este habiendo estado tantos años en la escena y habiendo trabajado con una enorme cantidad de bandas locales?

CM: El suceso es genial! Pero hoy no veo cosas impensadas, porque hubo casos de músicos uruguayos tocando en el exterior tocando en bandas que se hicieron mega gigantes, con ventas de miles de discos, entonces uno ya vivió cosas impensadas. Material que llegó lejísimo, bandas que llegaron a editar discos con sellos extranjeros… antes era común poner tu cassette en un sobre y enviarlo a la revista especializada que se te ocurriera, y generalmente siempre había buena disposición.

R!: – Recordás cuál fue el primer show de metal que fuiste como público?

CM: El primero fue el Montevideo Rock I en 1986, tenía catorce años y me llevó mi hermana. Fue maravilloso en ese momento ver a La Torre, estaba enamorado de Patricia Sosa (risas). Ella tenía su banda Heavy en ese momento, y daba la casualidad que en esa época estaba el ranking de El Dorado FM y había un tema de ellos que estaba liderando el ranking hacía mucho. En ese momento que ya había escuchado el disco, me dijeron que iba a haber un show donde iban a estar tocando ellos, y mi hermana que es diez años mayor que yo escuchaba el rock y el pop de la época y era muy fan de G.I.T., que era otra de las bandas que iban a tocar. Era todo un acontecimiento ir porque si no me equivoco fue el primer recital grande que hubo una vez que volvió la democracia, y además era todo nuevo, uno era un pendejo que no tenía idea que las bandas tocaban y de repente veía toda esa gente junta con pelo largo y tachas. Me acuerdo que tocaron un montón de bandas como Alvacast, Cross y Ácido, también tocó una banda llamada Zaffaroni que hoy sería un rock progresivo instrumental, Sumo y Los Tontos, que llegaron a tener hasta un programa de televisión.

R!: – Qué bandas nacionales actuales sentís que tienen una propuesta como para proyectarse internacionalmente?

CM: Hay muchas bandas que están trabajando muy bien hace muchos años. Te voy a poner como ejemplo Ecivresotua, que es una banda que empezó haciendo algo más Grindcore y con el paso de los años fueron buscando su propio sonido dentro de lo extremo. Hoy por hoy sigue siendo una banda extrema, pero ya no es 100 % grindcore y creo que ha logrado tener una identidad, y eso es lo que más cuesta. Pienso que hay una camada de bandas que han logrado tener un estilo propio, en función de años de trabajo serio, otro ejemplo de eso es Apneuma. También hay bandas que optan por mantenerse fieles al estilo que les gusta y a sus referentes, tal es el caso de Herrumbre, una banda más que respetable a esta altura, con 25 años de trayectoria. Hay muchas bandas que han trabajado bien, que pueden dar un buen show con un nivel para tocar con bandas de afuera, que pueden hacer cosas que puedan llegar lejos. Yo siempre digo que acá no es un tema de actitud ni de quien suena mejor, es un tema de componer buenas canciones, porque más allá del nombre de la banda, lo que permanece en el tiempo son las canciones y tienen que preocuparse de que las canciones sean buenas, que tengan un trabajo detrás. El sonido es otra historia, generalmente el primer material de las bandas de cualquier lado suena mal porque se lo grababan ellos mismos, y después fue viniendo lo demás.

Una de las mayores satisfacciones que yo me llevo laburando con las bandas, es que hay varias que han tocado junto a bandas internacionales y han hecho shows super dignos como Epsilon y Purasangre cuando tocaron con Exodus, Sentencia cuando tocó con Amon Amarth o Eclampsy cuando tocó con Behemoth. Estamos poniendo en la misma balanza gente que no vive de su banda como es el caso de todas las de metal de Uruguay, que no se dedica 100 % a eso, con bandas que sí viven de eso, que se dedican a eso un 100 % y que por tocar una noche están cobrando miles de dólares. Cuando ponés esas dos cosas en la balanza, las diferencias son abismales, sin embargo hay bandas locales que han dado shows más que dignos, de muy buen nivel. Al uruguayo le cuesta mucho ser sincero y enseguida aparecen los comentarios negativos, pero aún así aparecen comentarios en las redes dando para adelante a bandas locales que dieron un buen show, y esos son los comentarios que yo me llevo y que están buenos.
A diferencia de lo que mucha gente opina de que acá «no hay bandas de verdad», yo te puedo decir que he estado operando bandas, y me acuerdo la vez que estaba tocando Beelzebub antes de Decapitated, y atrás mio en la consola estaba Krimh, el batero de Decapitated, diciéndome qué buena que estaba la banda. O sea que no lo ve la gente de acá, pero lo ve un tipo que es un salado lo que toca, y ese tipo estuvo acá y dijo que la banda de acá estaba buena y hasta pidieron material. Un músico europeo que estuvo en millones de festivales, que recorrió el mundo, que es un profesional, vio que la banda era buena y un uruguayo que toma el ómnibus para ir a ver a la banda no lo ve, y eso ha pasado muchísimas veces. Ahí está el problema.