TEMPO – FUGHU (Argentina) en Sala Zitarrosa
Domingo 14 de Diciembre de 2008
por Raúl «Piki» Garrido
Esta era una noche en que todos los amantes del metal progresivo debían estar presentes, ya que Tempo es el máximo exponente de este estilo en nuestro país y Fughu fue una de las bandas elegidas por los propios Dream Theater para tocar junto a ellos en Argentina. Y si a eso le sumamos que Tempo junto a Santiago Bürgi (vocalista de Fughu) interpretarían la primera mitad del gran disco de DT, “Scenes From A Memory”, sería una cita obligada para todos aquellos que les guste este estilo.
Comenzando casi puntual, Tempo subía al escenario para brindarnos una gran dosis de virtuosismo. Su primera parte del show contó con temas propios, destacándose “Namarí” y “5556”, en los cuales no solo dejaban ver virtuosismo, sino que también se podía apreciar una faceta más sentimental de la banda. Luego de tocar sus canciones, la banda se retiró del escenario y comenzó a escucharse la conocida obertura del “Scenes From A Memory” para que luego saliera en escena Tempo junto a Bürgi, para tocar algunas canciones de este gran disco. Las interpretaciones fueron muy acertadas, ya que los músicos de Tempo en cuanto a técnica no tienen nada que envidiarle a los instrumentistas de Dream Theater y Bürgi mostró ser un gran vocalista, aunque su faceta de frontman la reservo más para el show de su banda.
Luego de la parte más esperada por los que íbamos a disfrutar de este show, Tempo volvió a retirase del escenario para luego volver con luces en sus dedos y en las baquetas. Sí, el mismo tipo de luces que a veces usa Steve Vai en sus conciertos. En el momento que Tempo con sus luces en los dedos subieron al escenario y comenzaron a tocar “Instrumedley”, (el cover del instrumental que aparece en el «Live At Budokan» de Dream Theater) me di cuenta que estaba frente a los músicos más virtuosos de la escena del metal uruguayo. Una muy buena interpretación por parte de la banda en la que no se notaron errores y lo que sí se noto es que han trabajado mucho para superarse y para brindarnos un buen show. Luego de todo ese entrevero de dedos, todavía nos quedaba por ver a Fughu, quienes en lo personal me generaban mucha expectativa por los motivos mencionados al principio de esta review. Apenas Fughu salió al escenario, demostraron por que es que habían sido elegidos por Dream Theater. Su show fue abierto con “Santa”, en el cual salieron un par de muchachos con máscaras griegas corriendo entre el público que se encontraba dentro de la sala. Luego de esta gran aparición en el escenario, la banda siguió con otro gran tema llamado “Dead End Start”, en el cual la banda siguió mostrando una faceta más teatralizada en la que Bürgi se lució de una gran manera demostrando ser un muy buen cantante y un excelente frontman. La mejor parte de su show comenzó cuando quedaron solos Bürgi y Marcelo Malmierca en teclados para interpretar “Solitude”, que es una balada con mucho sentimiento y en la que por momentos Bürgi me hizo acordar a LaBrie. La siguiente canción seria “One More Red Nightmare”, de King Crimson, que además de ser un gran tema, sonó con el estilo propio de Fughu, lo que la hizo mucho más interesante. Luego de esta gran canción del disco “Red”, siguieron con “Ashes” que fue otro de los temas más teatralizados, en el que contaron con la presencia de un “robot” que luchaba contra Bürgi. También subieron algunos miembros de Tempo para actuar junto al vocalista, ayudando en la lucha contra el “robot”. Después de este gran tema, cerraron su show con “Pain”, para que luego subieran todos los miembros de Tempo y se despidieran del público, junto a los integrantes de Fughu.
Esta fue una noche que quedara para el recuerdo de todos los que estábamos presentes. Fue muy bueno el show de Tempo y aún mejor el de Fughu. A los que nunca los habíamos visto en vivo nos dejó con ganas de ver más, ya que demostraron que se saben desenvolver muy bien en el escenario y que saben componer buenas canciones, esto sumado a las actuaciones que le agregan en vivo crean un muy buen paquete digno de abrir.